Hoy en día, más personas eligen cosméticos naturales y orgánicos. Hablando de cosméticos naturales o cosméticos orgánicos, por lo general, muchos a menudo se refieren a lo mismo. Tal vez en el habla cotidiana, la frontera entre estas palabras se borra, pero, sin embargo, todavía hay una diferencia entre ellas. ¿Cuál es la diferencia entre estos conceptos?
Para la exactitud de las definiciones proponemos dirigirnos a uno de los órganos principales independientes de certificación de los productos ecológicos-ECOCERT. Los estándares establecidos por ellos requieren un control integral y cuidadoso de todas las etapas de producción tanto para cosméticos naturales como orgánicos.
¿Qué parámetros evalúa el ECOCERT?
la limpieza ecológica de las tierras en las que se cultivan materias primas especiales,
ausencia de OGM, parabenos, fenoexitanol, microplásticos, siliconas, fragancias sintéticas y colorantes, ingredientes de origen animal (excepto los que son producidos por ellos: leche, miel, etc.),
tecnología de procesamiento de materias primas,
producción ecológica,
envases biodegradables o reciclables,
almacenamiento y transporte especiales.
Cosméticos naturales:
De acuerdo a las normas de producción de cosméticos naturales de la organización ECOCERT, dichos cosméticos deben estar hechos de recursos naturales renovables obtenidos solo por métodos que respetan el medio ambiente.
Según los estándares de ECOCERT, la proporción de componentes de origen vegetal debe ser al menos del 50%, de los cuales el 5% se cultiva por métodos de agricultura orgánica.
Cosméticos orgánicos:
El porcentaje de componentes naturales en productos orgánicos debe ser de al menos del 95%, que es casi el doble de los requisitos para los cosméticos naturales. Los ingredientes producidos por la agricultura orgánica deben ser al menos del 10%.
Resulta que los cosméticos naturales difieren del porcentaje orgánico de ingredientes naturales, donde en el primer caso los ingredientes naturales son solo el 50% de la composición, y el resto de los componentes pueden ser sintéticos. El 95% de los cosméticos orgánicos están hechos de productos de origen vegetal, donde al menos el 10% de su composición es un producto cultuvado por un sistema de agricultura orgánica. Al mismo tiempo, los compuestos sintéticos que son necesarios para la conservación del medio y la preservación de la estabilidad de la textura deben cumplir un bio-estándar especial.
Es posible que distinguir en el habla cotidiana estos dos nombres no sea tan importante. Pero conocer estas diferencias puede ser útil para no caer en una especie de trampa semántica. Cuando vemos la descripción de un paquete de cosméticos las palabras”Cosmética Natural”, lo primero en lo que pensamos, es que se trata de un producto cuyos ingredientes son completamente de origen natural. Sin embargo, este no es siempre el caso. Un fabricante puede colocar dicha descripción en su producto, incluso si casi el 50% de los ingredientes son de origen sintético. Y en términos de leyes y regulaciones, está completamente aceptado.
Por cierto, tal ambigüedad, cuando la misma palabra tiene diferentes significados en el contexto cotidiano y legal, está lejos de ser infrecuente. También se encuentra en el sector de los alimentos, la industria de la moda, donde, por ejemplo, el algodón se considera BIO si contiene un porcentaje relativamente pequeño de materias primas ecológicas y muchas otras.
¿Qué debe hacer el consumidor en esta situación? Leer cuidadosamente la composición de los ingredientes de los productos cosméticos. Ser responsable de su salud y no permitir dejarse engañar , ya sea intencionadamente o por un malentendido.