Jabón de seda

El jabón de seda se considera un jabón de lujo, un producto excelente no solo para la limpieza, sino también para el cuidado de la piel.

La fibra de seda agregada al jabón, como resultado de la reacción con álcali, forma proteínas y aminoácidos de seda en el jabón madurado, que tienen propiedades hidratantes y regeneradoras. Está claro que debido al alto nivel de PH, las propiedades hidratantes del jabón son un mito, pero después de probar el jabón con y sin seda con una composición similar, se dará cuenta de que es significativamente más suave en propiedades y más agradable en sensaciones.

La seda es un material de origen natural que reciben sus capullos de gusanos de seda. La seda también encontró su uso en cosmetología: se reveló que su composición incluye la sustancia Sericina, que está relacionada con el cabello y la piel humana, contiene aminoácidos esenciales, es capaz de retener una gran cantidad de humedad. La capacidad de la seda para limpiar los poros, aliviar la irritación, blanquear, rejuvenecer e hidratar la piel lo hace tan popular. El capullo de seda es la mejor opción de materias primas para su uso en cosméticos, ya que no se somete a un procesamiento adicional y contiene una gama completa de todas las sustancias útiles. Como parte del jabón, proporciona una espuma cremosa y densa, sirve como un componente de cuidado adicional, lo que resulta en un jabón de lujo para pieles sensibles, secas y maduras. También ampliamente utilizado en forma de peeling, las fibras de seda limpian perfectamente los poros, estrechándolos, nivelando el relieve de la cara, eliminando suave y delicadamente las partículas queratinizadas. No solo limpia la piel, sino que también la satura con oligoelementos beneficiosos, el resultado es un procedimiento complejo que devuelve el aspecto floreciente y la juventud.

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